El obispo de Almería expulsa de la casa sacerdotal a un obispo emérito del Congo enfermo de cáncer

En Almería no dan crédito con la decisión de Gómez Cantero. En el mensaje de Navidad de Antonio Gómez Cantero para la diócesis de Almería, tras su saludo y manifestar que «es la primera vez que se pone ante todos y todas», explica que la Navidad habla de: portales, de personas que vienen y van, de migrantes.

Una voz próxima al obispado afirma que a Infovaticana que «el obispo de Almería tiene como lema caminar hacia Emaús, pero los hechos parece que contradicen el papel, que lo aguanta todo. Quizá podría cambiarlo y ponerse como lema la parábola de aquel sacerdote que rodeó al enfermo en el suelo y no tuvo compasión de él, camino de Samaría. Y así nos encontramos con dos caminos que se cruzan, hacia Emaús o hacia Samaría».

Esta misma fuente, cuenta que «no se habla de otra cosa en las tertulias de movimientos sociales y curas (que tienen más miedo que espíritu misionero por lo que pueda pasar) de que el que manda ahora con bastón de hierro en Almería, pide dinero, pero no para emigrantes, aunque sean obispos». De igual modo, lamenta que «Cantero habla de acogida, mesa, pan caliente o frío (se come igual), encuentro, patera, belén, mariposillas, azucenas… pero en plena Navidad pone en la calle a un emigrante, aunque sea obispo, y además mayor, y además con cáncer porque dicen que dice que no lo va a mantener».

Otro sacerdote de Almería, lamenta el modo de actuar del actual obispo que pasa por «un deseo de agradar, como también demostró en el barrio de alto de la parroquia de San José cuando se acercaba a los abuelos del lugar para decirles: “cuenten conmigo y lo que necesiten, estoy para ayudarles” sin embargo, mantenía sin agua caliente al obispo emérito Adolfo González Montes que acabó padeciendo una bronquitis e incluso tuvo que pasar por el hospital. Todo porque se tardó más de dos meses en que se le arreglara la caldera de donde vive.

Pero lo más llamativo, afirman estas fuentes de absoluta solvencia, es su actitud con el Obispo emérito congoleño. Según fuentes diocesanas, muy cercanas a Cantero, llegó a afirmar: “a ver si vais a meter aquí todos los obispos jubilados de África”, ordenando su salida de la casa Sacerdotal San Juan de Ávila de forma inmediata.

La relación de este obispo con Almería es muy estrecha. «Este obispo emérito de Boma, pasaba largas temporadas en Almería, siempre arropado y acogido por el obispo emérito de Almería, de la mano de una misionera muy querida por toda la ciudadanía almeriense. Cipriano, el obispo congoleño padece cáncer desde hace años y la diócesis siempre ha sido su refugio para poder tratar su enfermedad», aseguran a Infovaticana fuentes conocedoras de la situación.

La situación es, que en plena Navidad, ha tenido que salir de la casa sacerdotal para ir a casa de unas religiosas. «Vienen y van, porque las religiosas que han podido acoger a este obispo enfermo a sus ochenta años, no tienen servicio de cocina y son los trabajadores de la casa sacerdotal donde vivía los que gustosos le llevan la comida a diario y tienden su mano para ayudar a este emérito de Congo para lavar su ropa y asistirlo en su enfermedad. Hasta que Cantero, que parece no recordar que hablar de migrantes comienza por tender la mano a los que están al lado, nuevamente prohíba que se preste ninguna atención a este anciano obispo africano», lamentan estas personas que ven con pena y tristeza lo que ocurre en la diócesis.

Por último, otra acción que casa poco con el discurso de «pobreza, ahorro, austeridad» del obispo, sería la reciente adquisición de un coche de la marca Ssangyong, modelo korand cuyo precio ronda en el mercado entre los 20.000 y 25.000 euros en su gama más alta. Lo que no está claro, apuntan estas fuentes, es cómo habría financiado la compra del vehículo, si corre por su cuenta o si se lo han regalado. «Queremos que el obispo lo aclare y de explicaciones», afirman a Infovaticana estas fuentes.