Cine Clan - Pérez, el ratoncito de tus sueños 2

Cine Clan - Pérez, el ratoncito de tus sueños 2

Subtitulado por Teletexto-iRTVE.

-¡Bienvenidosa la entrega anual de premios

para los mejores ratones del barcodel Ratón Pérez!

(TODOS) -¡Rata, Rata, Rata!

-¡Vamos, Rata!

# Todos tenemos un amor,

# que nos complica la vida,

# todos tenemos un amor# que nos rompe el corazón

# y nos complica la vida. #

-¡Con vosotros, María Laucha!

(Vítores)

-¡Vamos preciosa,el público no puede esperar!

-Premio al mejor ratón mensajero:

(SORPRENDIDOS) -¡Oh!-¡Ratarini!

-¡Venga, Rata!

(Vítores)

-Eh...-¡Disculpa!

# Todos tenemos un amor

# que nos complica la vida. #

-¿Cuándo llegará el Ratón Pérez?-Tiene mucho trabajo.

# Y nos complica la vida. #

(Alarma)

¡Ahh!

(ESFORZÁNDOSE) -¡Ah!

(SORPRESA, CONTENTO) -¡Oh!

Ja, ja.

# Sabes

# que nos estamos mirando,

# tu sonrisa se dibuja,

# yo me empiezo a ratonear. #

-¡Rata!# Ardemos

# ¡Cuando estamos frente a frente

# Mira qué ardor tan fuerte# que ya me empieza a quemar. #

-¡Por favor, no me comprometas!

# ¡Ardamos y ya no perdamos tiempo!

# ¡Ven y acércate, nena!

(Ronquidos)-¡Ay!

(Ronquidos fuertes)

(SORPRESA) -¡Ah!

(RONCA A GUSTO)

-¿Sr. Pérez, se encuentra bien?

Sí, sí, por supuesto.Ya he terminado.

¿Cómo fue la fiesta?-Estuvimos esperándole.

-Deberías disfrutar más de la viday trabajar menos para los humanos.

¡Los niños, Rata!-¿Ha tenido problemas, señor?

Lo habitual: juguetes por en medio,niños despiertos,

y encima las vacaciones.

Cada vez es más difícilmantener la ilusión.

-Corres muchos riesgospara que no te vean.

Si me ven no hay magia.

-Magia es que un ratóncambie dientes por monedas.

¡No, Rata! Magia es que sus dientesse conviertan en monedas.

(SORPRESA) -¿Eh?(CONTENTOS) -Ajá.

-¡Oh!-Ji, ji.

Es hora de ir a dormir, pero antesa lavarnos bien los dientes.

-¿Y esa cara, preciosa?-Me preocupa. Está agotado.

(HARTO) -Oh, Pérez, Pérez...

Me lo he preguntado mil vecesy aún no lo entiendo.

Si el mundo tiene6.500 millones de habitantes,

y nacen 210.000 personas al día,

¿cómo consigue el Ratón Pérezcambiar tantos dientes por monedas?

¿Y si nos vamos de vacaciones,cómo sabrá dónde encontrarme?

¡Mamá!

(Se abre y cierra puerta)

¡Mamá!

-Muriel Labecque, nuestra aclamadacompositora y pianista,

viajará otra vez para darotro magnífico concierto

de la mano del excéntrico productor,Gil Penkoff.

En el concierto,como todos los años,

presentará una suitecompuesta para la ocasión.

Publicidad. (TOSE)

-¡Agua por favor!-¿Estás bien?

(Toses)-¿Qué ha pasado?

-¡Dios mío!-¿Qué ocurre?

-¡Llamad a un médico!¡Llamad a un médico!

-¿Qué pasa?Si no estoy en casa,

¿cómo me encontrará el Ratón Pérez?

-¿Se te ha caído ya?No.

-Entonces, ¿qué problema hay?Se me mueve.

-¡Ana!

-¿Te gusta jugarcon lo de los demás?

-¿Quién es?Fernando.

-¡Cállate! Y la próxima vezque toques mis cosas, te mato.

-Ay, chicos, no peléis,¿no estáis contentos?

¿Cuánto hace que no nos vamostodos de vacaciones?

-Nosotros nos vamos de vacaciones.Tú vas a trabajar.

-Pero vosotros saldréistodos los días por ahí con papá.

(Teléfono) Ring, ring

¿Diga?-Lucas, pásame con mamá.

¡Papá, se me mueve un diente!

-Vale, pásamela, por favor.

-Hola.-¿Cómo estás?

-Bloqueada, no sé.Todavía no me convence.

-Grandes noticias,me dan un informativo.

(CONTENTA) -¡No!-Sí.

Pero no podré ir de viaje.

-¿Qué?-Es una oportunidad única, Mu.

De Mu nada, decidimos pasarestas vacaciones los cuatro juntos.

-¿Quieres que lo rechace?-Yo no me puedo ir sola con ellos.

-¿Y cuando la señora se va a darconciertos y me los quedo yo?

-No es lo mismo.-Sí lo es.

Y estar solos los tres juntosos irá bien.

-¿A qué te refieres?-Lo sabes muy bien.

-Yo estaré encerradapreparando el concierto,

¿con quién se quedarán?

-Que te pongan el piano en la casa.

-¡Le diré al Sr. Penkoff,la primera vez que me contrata,

que cargue el piano hasta la casa!¡Qué ideas tienes!

¡Ay, déjame!-¡Cállate!

-Chicos.

Prometedme que os portaréis bien.

¿Tú por qué no vienes?

-Quiero ir, pero tengo trabajo.

-Entonces no quieres. Nunca pasamosunas vacaciones como una familia.

-¿Te portarás bien?

Necesita tranquilidad para componer.

¡Mira, papá, es el último!-¡Qué bien, Lucas! Ya eres mayor.

¿Cómo me va a encontrarel Ratón Pérez si no estoy en casa?

-No te preocupes por eso,el Ratón Pérez nunca falla.

(Ópera)

(SUSPIRA)

(Olas de mar)

-¡Señor Pérez!

Disculpe.

¿Eh?-Los dientes, señor.

¿Qué?-Me faltan los dientes de anoche.

Ah, sí, claro, están ahí.

-Bueno, el faro 250necesita una lente nueva

porque una gaviota la rompió.

Un accidente...

-Ya no sé qué hacer.

María Laucha no me escucha.

Está siempre detrás del Ratón Pérez.

Yo le canto, le bailo...

Dime, Morientes,¿qué más puedo hacer?

-Prueba con un pocode indiferencia. Nunca falla.

-¿Hola?

Hola, hola. ¡Funciona!¡Sí! La casa está muy lejos

pero hay cobertura.Averíguame por qué Lucía le dijo

a Natalia que Fernandome llamaría esta noche.

Sí, necesito saberlopara pensar qué le digo.

Te llamo luego.

Madame Muriel Labecque.

Al fin tengo el placerde conocerla.

-Sr. Penkoff.Creía que estaríamos en el centro,

quería llevar a los niños la ciudad.

Oh, y yo creí que de esas cosasse ocuparía su marido.

-Se equivocó.

Bien.

De todos modos, no creo que tengamucho tiempo para paseos, señora.

Pero por favor, acompáñeme.

He alquilado lo mejorpara una artista de su categoría.

(Graznidos)

(Se abre puerta)

Naturalmente, la casa tienetodas las comodidades:

teléfono, internet, televisióny por supuesto una heladera llena.

Cada día, una señora vendrádurante tres horas para cocinar

y ocuparse de la limpieza.

¿A que está perfecto?

¡Vamos a empapelar la ciudadcon su nombre, Muriel!

¿Cómo vaesa maravillosa composición?

-Todavía no está lista.(CHASQUEA)

Las manecillas del reloj vuelan,

cada vez quedamenos tiempo para el concierto.

-¿Qué hace el piano en la casa,Sr. Penkoff?

Muriel, por favor, llámeme Gil.

-No pretenderáque trabaje aquí... Gil.

¿Y por qué no?

Le aseguro, que no encontraráen el mundo un lugar como este.

Esta casa es...-El que llegue primero elige cuarto.

...el paraíso de la tranquilidad.

-¡Este es mi cuarto!

¿Qué te pasa?

Se me ha caído el diente.-Ay, ¿el Ratón Pérez vendrá o no?

Tengo que hacerle tantas preguntas.

¡Ya!

-Estamos recibiendo

muchas señales del otro hemisferio.Lucas es el primero.

(SUSPIRA CANSADO)

-Señor, ¿no deberíamos contratarun nuevo capitán para el barco?

Después de lo que pasó con Fugaz,prefiero hacerlo yo mismo.

-Señor Pérez.

Quería decirle... creo que deberíair acompañado en esta misión.

¿Acompañado?-Sí.

Con algún ayudante.-¡Yo! ¡Yo!

No llevo ayudantes a mis misiones.-Parece muy cansado...

María Laucha, ¿cuántas vecestengo que decirlo?

Yo puedo solo.

Nos vemos al amanecer.

(LLORA) -¡Oh!

(BOSTEZA)

Esta noche me quedaré despiertopara hablar con el Ratón Pérez.

-Se nota que eres un crío.El café no sirve.

Además, si te quedas despierto,no te dejará nada.

¿Por qué no?-Porque no.

Pero, ¿por qué no?

-Porque no, Lucas.Ay, Dios.

Mamá ha dicho que hagamos la cena.-Hazlo tú, yo estoy ocupada.

¡Dame eso!

¡Ven aquí!Ja, ja, ¿a que no me coges?

¡Mamá, Ana tiene novio!-¡Deja de decir tonterías!

¡Ay! "¿Fer me llamará?".-¡Basta!

Os pedí silencio.-Dame eso.

-A vuestros cuartos.-Yo no me voy.

Yo tampoco.

-Muy bien, ¿queréis jugar?

A ti te castigaré por lo que hagaella y a ti por lo que haga él.

¿Quién empieza?-Es ridículo.

-Castigado sin Playpor contestar mal.

¿Yo? Si ha sido esta.

Sin guitarrapor insultar a tu hermana.

-¿Eres bobo?-Sin tele por insultar más.

¡No!

-Sin móvil todas las vacaciones.-¡Eso no!

-Ana.-¡No!

-¿Seguimos jugando?

-¡Te vas a acordar!

¡Adelaida!

-He enviado a tu secretariaa hacer un recado.

Espero que no te moleste.

¿Cómo podría molestarme,Sr. Gunther?

Ya sabe que mi casa es su casa.

¿A qué debo el honor de su visita?

En este momento no tengo el dinero,

pero tengo algo más importante,señor Gunther. Un gran proyecto,

con el que pienso pagarle...la mitad.

-¡Todo, Penkoff!

Y en 48 horas.

¿Cómo consigo ese dineroen tan poco tiempo?

(Grillos)

(Ruiditos en el suelo)

-¡Ay! Lo que me faltaba.

(Teléfono) Ring, ring

Penkoff Espectáculos, dígame.

-Sr. Penkoff,¡hay ratones en la casa!

¿Muriel?-Ratones.

Me trae a esta casa alejadade la ciudad, sin sala de ensayo,

con una cocineraque no ha aparecido, ¡y con ratones!

Les tengo pánico. ¡Se lo aseguro,así no voy a trabajar!

¡Si no viene mañana a primera hora,me largo! ¡"Au revoir, monsieur"!

¡Y encima esta loca me amenaza!

(EXPIRA)La necesito demasiado.

¡Adelaida!

(Crujido)

¿Ratón Pérez?

(Ruidito)

Ratón Pérez, ¿estás ahí?

(SUSPIRA)

(BOSTEZA)

-Buenos días, señor Pérez.

¿Señor Pérez?

Cine Clan - Pérez, el ratoncito de tus sueños 2

(Olas y gaviotas)

¡Es un honor tenerte aquí!¿Me firmarás un autógrafo, verdad?

¿Y tú quién eres?¡Qué maleducada! Me presentaré.

Hola, chico, yo soy Lolay ésta es mi casa. Mira.

Río, Roma, Egipto...

Por aquí pasa gentede todo el mundo. De Holanda,

de Viena, de la India,de España, de Argentina,

de Méjico, ¡del mundo entero!

¿Dónde estoy?En mi casa, ya te lo he dicho.

Dormías tan a gusto que te trajeaquí sin despertarte.

Mira lo que te preparé,queso para el desayuno.

¿Qué te parece?¡Ya es de día!

Debo irme a avisar al barco.Si acabas de llegar, niño.

Mira, esta se la quité a la niña.Tiene un montón de cosas increíble.

¿Dónde está la moneda?

Allí.

(Rock and roll)

No te preocupes, chico,lo he arreglado todo.

Déjate llevar por la música.¡Ven!

¿Qué lo has arreglado todo? ¡Au!

(Sirena de barco)

(CARRASPEA)-El Ratón Pérez no ha vuelto.

Y para que no paselo mismo que la última vez,

un equipo de rescate deberá salirhacia su último destino.

Necesito un voluntario para trabajarconmigo en esta misión...

-¡Yo, yo, yo!-¡Yo!

...para rescatar a Pérez.-¡No!

-¡El Rata entonces!

(Admiración) ¡Oooh!-Je, je.

-Esperoque no le haya pasado nada malo.

(ASUSTADO) -¡Oooh!Ji, ji.

¿Sabes, Pérez? Te hacía un poquitínmás joven, no te ofendas.

Quizá si llevaras el pantalónmás bajo y un jersey más moderno...

¡Basta!Esto es serio, señorita.

¡Lola!

Esto es serio, Lola. ¿Qué creesque has arreglado? ¿Qué has hecho?

Ay, no te pongas así,chico, no es para tanto.

Le dejé al niño una nota, de esasde las tiendas: "Vuelvo enseguida".

¿Una nota?¿Y el diente?

¿Qué diente?He de volver ahora mismo,

antes de que se despierte.

Está bien, si insistes.

Creía que te gustababailar conmigo.

Venga, vamos.¿Vamos?

¿Y cómo piensas irsi no te llevo?

¿Y eso para qué es?

(ASUSTADO) -¡Oooh!¡Ja, ja!

¡Esto es fantástico!¡Nunca había montado con alguien!

¡Agárrate bien, Pérez!

¿Vives sola?Claro, esta es mi casa.

Todos van y vienen,pero yo siempre estoy.

Me divierto un montón.¡Y hago lo que quiero!

(CONTENTA) ¡Uh!(CANSADO) ¡Uf!

Pérez se ha enfadado conmigo.

¡Pérez!

-¿Así que hablastecon el Ratón Pérez?

¡Me ha encontrado!Pero no me ha dejado la moneda.

-¿Lo ves? Te avisé.

Le habrá pasado algo. Ha cogidomi diente y me ha dejado esto:

"Vuelvo enseguida".Así que debe estar cerca.

-A ver, enséñamelo.¡No!

-¡Lucas!

Es urgente comunicar con mi barco.¿Con tu barco? Vamos.

-Te he preparado un móvily un mapa de la casa marcado.

-¡Guau!Haberlo dicho antes.

-Recuerda que los humanos no debenverte conduciendo por la calle.

-¿No me parezco a Indiana Jones?(EUFÓRICO) ¡Ja, Ja!

(Jaleo de voces)

-¡Silencio!

María Laucha.-¡Sr. Pérez!

Han robado el diente de Lucasy no he podido cumplir la misión.

Debo encontrar el diente y dejarlela moneda y eso va a entretenerme.

-No se preocupe,ya he enviado a Rata para ayudarle.

¿A Rata? Yo ya tengotoda la ayuda que necesito.

-¿Ayuda? ¿Qué ayuda?

Volveré lo más rápido que pueda.

Mientras tanto envíe a los niñosuna nota de: "Vuelvo enseguida".

¡Ja!¿Entendido?

-Sí, pero ¿qué clase de ayuda tiene?

(Sorpresa) ¡Oooh!¡Ha colgado!

Ayudante del ratón Pérez.¿Quién lo hubiera dicho?

Antes busquemos mi cofreen el jardín.

Sí, mi capitán.

¡No, no, no...!¡A volar!

"Los ratones trepan por casitodas las superficies verticales:

ladrillos, madera, tubos, telasmetálicas, columnas y cables".

(Pájaros) Pío, pío

(Taladradora)

¡Adelaida!

-Cinco minutos, Sr. Penkoff.

(Taladradora)¡Dimitri!

(Pájaros) Pío, pío

(INSPIRA)

¡No!

Te enfadas porque no le dejéla moneda anoche,

y tú puedes hacerlo y no lo haces.

No te entiendo, chico.¡Cuidado!

¡Vamos!

¿Ratón Pérez?

¿Estás ahí?

¡Cuidado!

Tu trabajo sí que es entretenido.

Sí, ya lo creo.¿Por dónde podemos entrar?

Por aquí.

Cuando...

el roedor entraen la trampa, la puerta...

se cierra sola.

Y en ese instante se liberaun gas venenoso, que lo liquida.

No hay peligro de contaminación,ya que el cadáver

queda completamente aislado.

¡No puede poner eso!-¡Lucas!

No le dejes poner las trampas.

¿Qué pasa, chiquitín?¿Te gustan los ratones?

Si las pone,matará al Ratón Pérez.

¿El Ratón Pérez?

Está en la casa.

-No, es uno de sus juguetes.Tiene mucha imaginación.

¡No es un juguete!Es el cofre del Ratón Pérez.

-Por el día descansa para poderhacer su trabajo por la noche.

Pero no me ha dejado...-Por quedarte despierto.

No te metas.-Deja el diente esta noche

y duérmete para que te pueda dejarla moneda. Continúe.

¡Sr. Penkoff.!

Sí, eh... sí.

Es todo, Muriel, ya puede sentirsetotalmente protegida.

-Esperemos que así sea.

(Teléfono) Ring-¡Es papá!

Pásame con él.-Hola, Marc.

-¿Me devuelves el móvil?

-No, es que son tremendos,peleando todo el día.

Lucas imaginandoque el Ratón Pérez está aquí.

Ese Ratón Pérez, es el ratoncitode los dientes, ¿verdad?

¿Y eso?¿Dónde lo encontraste?

En el jardín,pero el Ratón Pérez ya no está ahí.

¿Eso es de Pérez de verdad,o te lo inventaste tú?

No, lo que pasaes que mamá nunca me cree.

Pobre chico.

Sé cómo te sientes, mi infanciatambién fue muy difícil.

Te comprendo perfectamente.

También me ha dejado esto.

-Intenta venir,te lo pido por favor.

Le enseñaré por dónde ha entrado.

-¿Cómo voy a aplazarlo unos días?Aplaza tú las noticias unos días.

-En este momentosoy imprescindible.

-Ah, muy bien.

Espera, Lola.¿Dónde vas?

Adonde no me persigan niños,ni trampas,

ni ratones con misiones imposibles.Vale, ha surgido algún problema...

¿Algún problema? Hace años que vivoaquí sin que se den cuenta.

Si ahora ponen trampas,es por tu culpa.

Lo sé, sólo tenemosque encontrar el diente,

recuperar mi cofre, entregarla moneda y todo solucionado.

¿Nada más? Te estás pasando, chico.

No pienso metermeen líos por un humano.

Es un niño y lo que está en juegoes su felicidad.

¿Y por qué no se la has dadoen el jardín?

Porque las cosas no se hacen así.

Cuanto antes termine, antes me iréy todo volverá a la normalidad.

Vamos, Lola, yo...

Yo no puedo hacerlo solo.

En la habitación del niñopuede haber quedado alguna pista.

Digo, de quien se llevó el diente.Pero no podemos.

Es de día, y la casaestá llena de humanos.

¡Eso déjamelo a mí!

Cálmate, no tienen forma de entrar.

Tu puerta está cerrada.

Yo no la he cerrado.

Sígame.

(Pájaros) Pío, pío

Ese balcón da a mi cuarto.

¡Glups!

(CON ESFUERZO) -¡Uf!

¡Eh, Pérez!

¡Un pelo...!¡De la niña!

Ay, no pudo haber sido Ana.

¿Por qué no? Tú no la conoces.Pero soy muy intuitiva, Pérez.

Por ejemplo, enseguida notéque te falta diversión, mi amor.

¡Mira!(GRITA ALEGRE) ¡Uuh!

¡¿Lo ha visto?!

-¡Lucas!

¿Qué haces aquí?-¿Y tú? Es mi cuarto.

¡Los niños!¡Vamos!

-¿Qué hace aquí?Inspecciono.

¿Lo ha visto?Ven aquí.

Tenías razón.¿Y cómo es?

Como un ratón, pero con ropay camina sobre dos patas.

¿Y ahora dónde está?Dentro de estas paredes.

Escucha...

este ratón, ¿lo ha vistoalguien más alguna vez?

No, nadie.

Y a ti te gustaría verlo.A mí me gustaría saber

cómo hace todo lo que hace,porque no lo comprendo.

No te preocupes, Lucas.

Juntos vamos a encontrarlo,

para que le preguntestodo lo que quieras.

Gracias.

¡El muchacho tenía razón!

(Graznidos)¡El Ratón Pérez está dentro!

Llamen a los diarios,las cadenas de tv más importantes,

y vean qué nos ofrecenpor la exclusiva del Ratón Pérez.

¡Es la mayor noticia en décadas,y es mi exclusiva!

Ya lo estoy viendo:"Penkoff presenta:

la gran revelacióndel ratón de los dientes".

(Graznidos)

¡Aprisa!¡No hay tiempo que perder!

Voy a desactivar el gas venenoso.Tengo grandes planes para ese ratón

y para mí también, je, je.Arrivederci, Sr. Gunther.

El mundo enterose rendirá a mis pies.

(GRUÑE) -Grrr.-Cállate! Y obedece al Sr. Penkoff.

(Graznidos)

Mira, Penkoff se ha ido.

-Sr. Penkoff.

Creía que se iba.

Muriel...

para su tranquilidadhe decididoquedarme, por si necesita algo.

Y para que nada la moleste.

-Como usted quiera.

# Yo romperé tus fotos,# yo quemaré tus cartas

# para no verte más,# para no verte más. #

-No te habrán enviadoa controlarme, ¿no?

-No, no, no. No.

¿A que no sabías que había esto?

-¡Lucas, a comer!

Sr. Penkoff, ¿usted quiere algo?

No, muchas gracias, Muriel.

Tú ahora, vete a comer,pero después...

averigua a dóndellevan estos conductos.

Sí.Bien.

-¿No ves que estoy tocando?

¡Mamá! ¡Ven a ver a papá!

-Y nos vamos hacia la zona norte.

Agradable, mayormente soleado,

poca humedady temperaturas máximas de 25 grados.

-Ya estamos todos.

-El tiempo ideal para todos aquellosque están de vacaciones.

-¿Cuándo me devolverás el móvil?

-Cuando no actúes como una cría.

Hemos visto al Ratón Pérez.

Bueno,el señor Penkoff lo ha visto.

Dice que lleva ropay camina a dos patas.

-¿Lo has hecho tú?Sí.

Ese niñose ha obsesionado contigo, Pérez.

Yo me esperaríaantes de volver a salir.

# Carnaval,# que la vida es un carnaval... #

Oye, me gusta estode ser tu ayudante, ¿sabes?

Podrías llevarme a todastus misiones.

Las normas dicenque el Ratón Pérez trabaja solo.

"El Ratón Pérez trabaja solo".

Qué poco humor tienes, chico.¿Nunca haces vacaciones?

¿Y tú nuncasales sin maquillaje?

Claro que no,y no me cambies de tema, ¿eh?

Lo mío es trabajar todos los días.

Mira, observa.

El secreto está en el movimientode caderas. Es como bailar, ¿sabes?

Puedo enseñarte.

(Piano)

(Mismo tema en guitarra eléctrica)

(Guitarra apagándose)

(Marcha turca)

¡Cómo toca esa niña!

Créeme, Ana no puede haber robadoel diente de Lucas.

Ahora es el momento, vamos.Con lo bien que estábamos.

-Veo a una mujer tocando el piano,

a una niña tocando la guitarra.

¡Ahí está Pérez!

¡Guau!-¿Qué pasa con Pérez, Rata?

-No, nada, preciosa, ya nos vamos.-¿Cómo que os vais?

Por favor, Rata,dime lo que pasa.

-Pérez tiene todala ayuda que necesita.

Está en muy buenas manos.

-¿Pero cómo es posible?¿Y los niños? ¿Y las reglas?

-¡Tienes razón!Es una barbaridad.

-Por supuesto.

-Iré a por él, preciosa.Por ti y por los niños.

-Hazlo. Ay, qué suerte tenertea ti, que me entiendes.

-Je, je. ¡Vamos!-¡Sí, sí, sí!

Con esto los atraparé.

(Móvil) Ring, ring

-Es Fer.

-¿Hola?

¿Quién es?

Ah, no había reconocido tu voz.

-Es increíble, Sr. Penkoff.El mundo enloquece por ese ratón.

He puesto sensores de movimientoen las trampas, conectados a mi PC.

Si cae en alguna,lo sabré de inmediato.

Esta chica no deja de sorprenderme.Verás qué montón de cosas tiene.

¡Vamos!

-Las empresas más importantesofrecen millones.

¡Un momento!

La trampa que hay en el cuartode la niña se mueve.

Creí que ibas a enseñarmea utilizarlo, no a robar.

Y ¿cómo si no, se lo montauna ratoncita que nunca sale,

para estar a la moda, eh?

-Pero todosexigen una prueba de que vive.

Y la tendrán.

¿No sería mejor que salieras más,que recorrieras el mundo?

Yo estoy bien aquí.

Te conformas con poco, Lola.El mundo está lleno de sorpresas.

Esta cajita ya la he visto antes.Pero ¿qué haces?

No se curioseael diario íntimo de una señorita.

¡¿Qué?!

¡No!

(DOLORIDO) -¡Au!

¡Vamos!

(MUY DOLORIDO) ¡Aaaah! ¡Oh! ¡Oh!

(Pasos en madera)

¡Ay, esto no se acaba nunca!

¡Si hubieras dejadola moneda sin el diente!

¡Lola!No entiendo

por qué te metes en tantos líos.Para mantener viva la ilusión.

Ratón Pérez...

Ratón Pérez, soy yo, Lucas.No tengas miedo.

Sólo quiero saber

cómo consigues entregartantas monedas a tantos niños.

¡Contéstale!¡No!

Sólo quiere saber cómo lo haces.¡No! Son las reglas.

¡Deja las benditas reglas!

Ratón Pérez, por favor.

¡Por favoooor!

¡No!¡Ah!

-¡¿Ahora qué pasa?!

(SILBA) ¡Fiu!

-¿Se puede saber qué pasa?

¡Nada! ¡Trabaje tranquila!¡Ahhh!

(Marcha turca muy rápido)

¡Aaahhh!

¡Penkoff!

¡Penkoff, no le haga daño!

-¡Así no puedo trabajar!¡Renuncio!

¡No me amenace,o tendrá que pagarme usted a mí!

-Lo sé muy bien, leo lo que firmo.

Muriel, ¡discúlpeme!

Tranquilícese.Relájese.

Tómese la tarde libre.

Yo me encargaré de esos ratones,y de que vuelva la tranquilidad.

¡No son ratones, mamá!

Es el Ratón Pérez.-Lucas, ¡basta ya de Ratón Pérez!

-¡Pérez!¡Rata!

¡Cuidado!

-Pero...

¡No le haga daño!

(MIEDOSO) -¡Uh, uh, uh!

¡Penkoff!

-Ay, ay, ay.

Ay.

¿Qué estás mirando, idiota?

-Estas son las mejores ofertas,

pero nadie cerrará un tratohasta que no lo vean.

-Oh...

Ah, perfecto.

Señores, les presentoal ratón Pérez.

-Ay.

-¿Eso es el ratón Pérez?Claro que no.

Es una rata asquerosaque no interesa a nadie.

-¿Qué?Elimínenla.

-Eh, no soy una rata cualquiera,soy amigo del ratón Pérez.

-¡Habla!-Y canto.

Vaya, vaya, vaya.

Tal vez, nos resulte útildespués de todo.

-Ah...

Mamá...

-Mis cosas, ¿qué has hecho?

No se te puede dejar sólo.

Yo no fui, fue, Penkoff.

-Sí, claro.Quería coger a Pérez

en el tejado y se cayó.

Luego lo atrapóen la puerta de la cocina.

-No se qué he hecho malcon vosotros, pero no me respetáis.

-No es verdad, mamá.Pérez estaba en esta casa.

-Se que es culpa mía,que no os dedico

el tiempo que, realmente, quisiera.

Pero tengo que dar un conciertoy todavía no he escrito una nota.

-Déjame ayudarte.

-Bueno...

Te espero abajo.

Penkoff me engañóy se lo ha llevado.

-Penkoff no se lo ha llevado,Pérez está en la casa.

Entró en la cocinay cerró la puerta.

¿Lo has visto?-Llevaba ropa y corría a dos patas.

¿Así?-No, con otra ropa.

¿Has hablado con él?¿Te ha dado mi moneda?

-Tengo que ir con mamá.

El diente no aparecey Penkoff tiene a Rata.

Tenemos que volver enseguida.No, es muy peligroso.

Creía que querías que me fueselo antes posible.

Hum...

(JADEA) Uf, uf...

Ja, ja, ja.

(SE SORPRENDE) Ah...

Ah...

Ja, ja, ja.

(Llaman a la puerta) Pum, pum.

(Llaman a la puerta) Pum, pum.

(Llaman a la puerta) Pum, pum.

¿Eh?

¿Y, ahora, dónde vas?

Sabía que esto lo había vistoen algún sitio.

Oh...

Ah, ¡el diente!

¿Qué te pasa?Confié en ti.

¿Qué estás diciendo?Ha sido, Ana.

Ahora resulta que fue, Ana.Es su cajita de música,

la encontré en su cuarto.

Hum...

-¿Penkoff?Muriel.

He venido a ofrecerle mis mássinceras y humildes disculpas.

Es una gran artista yyo estaba estresado.

No debí hablarle así.

-¿Qué hace usted aquí?

¡Ay!

-Lucas, ¿qué haces?

-Penkoff, engañó a Lucas.Esta chica está mal de la cabeza.

No tengo ni ideade qué habla.

Miente, mamá.-Quiere atrapar al ratón Pérez.

Muriel, sus hijos no están bien.

Solo vinea presentar mis disculpas

y escuchar su nueva pieza.

No es verdad.Se lo suplico,

tengamos la fiesta en paz.

-Miente, mamá.¡Basta de escándalos!

(AMBOS) ¿Eh?

-Niños, venid conmigo.

-Pero, mamá...-Venid conmigo.

Ratón Pérez...

Se que me estás escuchando.

Tengo a tu amigo.

Si te entregas, lo dejaré libre.

Si no, me veré obligadoa convertirlo en comida para gatos.

-Mamá, no nos puede gritar así.Está loco.

¿Has visto cómo nos trata?-Sí, y cómo le pegaste una patada.

-Mamá, Penkoff es un mentiroso.

Voy a darte...

Cinco segundos.

No te entregues,¿qué pasará con los niños?

Es cierto, pero no puedoabandonar a Rata.

Dime que no fuiste tú.

¿De verdad crees que robé el dientey te mentí todo el tiempo?

Cinco.Mamá, ¿no entiendes que él

no ha venido por tisi no a por Pérez?

¿Por qué no nos crees?-Él no me cambiaría

por un ratón.

Cuatro.Prometo no robar más,

pero necesito que me creas.

Te creo.Tres.

No quiero que te hagan daño.

Entonces deberás salir de aquípara ayudarme.

Dos.¿Pero, cómo?

No estarás sola.

Uno.

-Ahora sí, Penkoff,la suite para piano y orquesta.

No se preocupe, Muriel, de repenteperdí el interés por la música.

Tengo planes más importantesque atender los caprichos

de una pianista loca.

Au revoir, madame.

Oye, ¿y tú, quién eres?

-Rápido.

Confirme la conferenciade prensa para mañana en el hotel.

Presentaremos al ratón Pérezy nos haremos millonarios.

Oh...-¡Ah!

Ven aquí.

-¡Ah!

(AMBOS GRITAN) ¡Ah!

He estado investigando tu tarea.

Conmovedor, pero poco lucrativo.

¿Ha liberado a mi amigo, Penkoff?

(RISA MALÉVOLA) Jo, jo, jo.

¿Nunca pensaste en tomarteunas vacaciones, Pérez?

Mañana te presentaréen una gran conferencia de prensa

para que el mundo te conozca

y cuentes lo que todosquieren saber.

¿Cómo lo haces?

Después, te venderé al que másdinero ofrezca por ti.

¿Y qué pasa si me niego?

-¡Ah!

Tu amigo se convertirá...

En rata al cubo.

(GRITA) ¡Ahhh!

-Mirelo que hemos encontrado, señor.

¿Por qué hace esto, Penkoff?

Lucas.Pérez.

Lucas, Lucas...

Eras el primero que queríaatraparlo para preguntarle.

-Sí, pero ahora queremosque lo suelte.

Tarde.Mañana, el ratón Pérez,

será vendido a quienmás ofrezca por él.

(Portazo) Pum.

Lola...

Me encantaría que estuvieras aquí.

Pero si estoy aquí, chico.¡Lo has conseguido!

-Je, je.

Gracias.Gracias a ti,

mi chocolate.

-Oh.Rápido, Rata está en esa máquina.

Oh...

-Esto sí que es una sorpresa.

¿Es así como pretendíassalvar a Pérez?

Buen trabajo, chico.

-Veo que a tite ha ido mejor, chica.

Lola, para ti.-Rata, para ti.

Descansa, Pérez,tengo grandes planes para ti.

-Mamá.

-No os vayáis así nunca más.

Si os pasa algo, me muero.Tenías apagado el móvil.

-Nunca nos escuchas.

Intentamosdecírtelo de mil maneras.

-Y tenías razón, Lucas.

¿Me perdonas?

-Penkoff, tiene al ratón Pérezen este hotel.

Lucas y yo lo seguimos,pero, Dimitri, nos descubrió.

Nos ha llevado a un sótanodonde está prisionero.

Y nos ha hablado, mamá.

-Oh...

¡Ah!

¿Hum?

¡Yuju!

-Nos vamos a quedar en el hotel,¿algún problema?

-Algo le ha pasado,estoy segura.

-Ay, el amor, el amor.

-Últimas noticias.Se desvela el misterio

del ratoncito de los dientes.

El productor de espectáculos,Gil Penkoff, anuncia para mañana

una conferencia de prensaen la que el legendario ratón,

se presentará al mundo.

-Oh...

-Varias empresas se disputansu exclusividad

con contratos millonarios.

-Hay que llamar a papá.

-No.

Ana...

Leo,... Lucas tenía razón,el ratón Pérez estaba en la casa.

-¿Qué?-Diez segundos.

Leo, el teléfono.-Él no quiere exhibirse.

Penkoff lo secuestró y lo venderádespués de la conferencia.

-Penkoff...

-Estamos en el hoteldonde está Pérez.

Pero no podemos hacer nada.

Tienes que venir, Leo.Los niños y yo te necesitamos.

-Tengo que irme, necesitoun cámara y dos billetes de avión.

-Tres, dos, uno, en el aire.-No.

No...-Paso por casa y voy par allá.

Cuidaos.

¿Qué?-Viene para aquí.

(AMBOS) Bien.

¿Rata?-¿Qué?

¿Qué hay entre Pérezy esa María Laucha?

-Nada, Pérez solo se ocupade los niños.

No los abandona por nada.

Los ha abandonado por ti.-Es verdad.

Pensé que los abandonó por ti,chica.

(RÍE) Je, je, je.

-Ay, ay.

Ay.

Vamos.

(SUSURRA)

Oh, rápido,tenemos que rescatar a Pérez.

(SUSURRA)

(Lenguaje Morse) Bip, bip.

-Ah...

-Acaba de llegar esto.

-Ah.Hágase cargo del barco.

Avise a los ratones.-¿Yo?

-Zarpamos inmediatamente.

(HABLAN EN VARIOS IDIOMAS)

-Disculpen...

Sus credenciales.-¿Perdón?

-Sin credenciales,no se puede pasar.

-Un día de gran emociónse vive hoy aquí.

En instantes,el mundo entero conocerá

a unos de los seres más maravillosode todos los tiempos.

El ratón Pérez.

El famoso ratoncito de los dientes,abandonará sus habituales

actividades nocturnas

y se presentarápara contarlos sus secretos

a todos los niños del mundo.

Y todo gracias a Gil Penkoff,su productor,

quien tras esta presentaciónespera cerrar negocios millonarios

que lo convertirán en unode los personajes

más poderosodel mundo del espectáculo.

Este es el díaque he esperado toda mi vida.

(Teléfono) Ring, ring.

¿Sí?

-Penkoff.Señor Gunther...

Tengo su dinero.

-Dinero no...

Quiero al ratón Pérez.

¿Perdón?-Esta tarde, en mi oficina.

Me temo que eso es imposible,señor.

Rápido, junten todo. Nos vamostras la conferencia de prensa.

¡Papá!

-Hijos...

Hola.

-No nos dejan pasar.

Bien.

-Perdóname.-Perdóname, tú.

-No, lo que pasa...-No, yo se cómo...

-Sí, pero yo también se...

-¿Qué pasó con las noticias?-Les dije que tenían

que confiar en mí.Que era el único que sabía

lo que pasaba con el ratón Pérez.

Gil Penkoff, productorde espectáculos,

es conocido en el ambientepor estafar a sus artistas.

Muriel Labecque,la famosa concertista de piano,

fue una de las estafadas.

Y, al ratón Pérez,a quién lo presentará de inmediato,

lo ha traído aquícontra su voluntad.

¡Buenos días, planeta Tierra!

Soy, Gil Penkoff,

Y estoy orgulloso de estaraquí para revelarles

la leyenda mejor guardadade todos los tiempos.

¡El ratón Pérez!

¡Penkoff, no lo haga!

Hoy, el ratón Péreznos contará a todos nosotros

y a los millonesque nos siguen en todo el mundo...

¡No, no lo haga!

-El ratón Pérez,no quiere estar aquí.

Lo trajo a la fuerza.

Pero, basta de introducciones.

-El ratón Pérezno quiere ser famoso.

Lo único que quierees entregar

las monedas a los niños¿no, Pérez?

Más vale que te portes bien.

¡Damas y caballeros!

Yo, Gil Penkoff,...

tengo el orgullo de presentarles...

Al ratón...

¡Pérez!(AMBOS GRITAN) ¡Noooo!

-¿Y dónde está?

-Eso, ¿dónde estáel ratoncito Pérez?

-¿Dónde está?Esto es un fraude.

-Farsante, estafador.

-¡Penkoff, traidor!-¡Estafador!

(Gritos) Fuera, fuera.

(GRITA) ¡Ohhh!

Sí.

Rápido, a la compactadora.

-¿Sabíais que no estaría allí?¿Lo conocéis?

No se, déjenos pasar.

-Sin credenciales,no pueden pasar.

-Dimitri.

-Leo.-¿Sí?

Oh...

-Ay, viene hacia aquí.

-Podemos hablar, Dimitri.

-¡Ay!

No, no, no...

-¿Qué tal?-Vas bien.

-Dale, Dimitri.-Vas por buen camino.

-¿Qué estás haciendo, imbécil?

Ja...Ah...

-!Ah!

-¡Oh!

-¡Ay!-¡Ah!

-Vale, vale, vale.

¿Estás bien? Vamos.-Sí.

¡Ay!

Muy bien.

Se acabó.

Entrégate o arrojoa tu chica al vacío.

Va, Pérez, juntos podemoshacernos millonarios.

Pero yo no quierohacerme millonario.

Eso es porque no escuchastelas ofertas que había por ti.

¿Y la ilusión de los niños?

Qué importala ilusión de los niños.

¿Pero en qué vives, Pérez?

Lo que importa es lo quelos niños pueden comprar.

Vamos, decídete.

Tu chica...O los niños.

Lo siento...

¡Penkoff!

¿Nunca has pensadoque el ratón Pérez no trabaja solo?

-Aquí estamos.

¡A la carga mis ratones!

(TODOS GRITAN)

Detenlos, Pérez.Detenlos o la suelto.

¡Pérez, sálvame!

¡Déjenme!

¡Ah!

Oh.-Vamos, rápido.

¡Ah!

-Bu.

¡Ahhh!

¡Ahhh!¡Ahhh!

-¡Sí!

¡Sí, sí!

-¡Sí!

El ratón Pérez.

Perdón, Pérez.

Gracias, Lucas.No debí confiar en Penkoff.

-La culpa fue mía.

El diente te lo quité yo.¿Qué?

-Hiciste que perdiera la llamadamás importante de mi vida.

Y, tú, que atraparan a Pérez.

-Perdóname, Pérez.Está bien.

Pero esto comenzócuando alguien decidió

esperarme despierto.

Lo hice porque queríapreguntarte algo.

¿Qué?

Si el mundo tiene6500 millones de habitantes

y nacen 210 000 personascada día...

¿Cómo consigues cambiarlos dientes por monedas

a tantos niños todos los días?

Simplemente, Lucas...

Lo hago.

Esta noche déjalodebajo de tu almohada.

Gracias, Pérez.

-Déjennos en paz.

-Apártese, soy Gil Penkoff.¡Apártense!

(TODOS LE GRITAN)

¡No!

-Chicos, ¿dónde está Pérez?Se ha ido.

-¿Dónde está?Con su familia.

Mamá, papá...Ha venido el ratón Pérez.

Misión cumplida.

¿No, Pérez?

Ha sido un placertrabajar contigo.

El placer ha sido mío.

Si algún día necesitas algo,ya sabes.

Lola, he estado pensado...

¿Sí?¿Por qué no vienes con nosotros?

Es que este es mi mundo.

En el barco somosuna gran familia.

Sí, lo se, pero...

Yo estoy bien aquí.

Adiós, Lola.Adiós, Pérez.

(Aplausos) Plas, plas.

-Bravo.

Muy bien.

-Volvamos a casa.

-Vamos.

¿Los billetes, quién los tiene?

¿De qué os reís?

Mamá, lleva esta, pesa menos.-El coche está fuera.

-¡Bienvenidos...

a la fiesta de la gran familia...

del ratón Pérez!

-¡Un momento, un momento!

En nombre del señor, Pérez,tengo el honor de presentaros

al nuevo capitán del barco.

-¡Ratito!

-¡Vamos, Pérez, únete a la fiesta!

Sí, sí, te felicito.

(SUSURRA)

Has venido.¿Y quién te iba a enseñar

a bailar si no, chico?

# Todos tenemos un amor

# que nos complica la vida.

# Todos tenemos un amor

# que nos rompe el corazón# y nos complica la vida.

# Todos tenemos un amor

# que nos complica la vida.

# Todos tenemos un amor

# que nos rompe el corazón# y nos complica la vida.

# Todos tenemos un amor

# que nos rompe el corazón# y nos alegra la vida.

Etiquetas: